Lessons | By : Scorpinok Category: Spanish > Anime Views: 1005 -:- Recommendations : 0 -:- Currently Reading : 0 |
Disclaimer: I do not own the anime/manga that this fanfiction is written for, nor any of the characters from it. I do not make any money from the writing of this story. |
Megatron is
teaching a lesson to an overgrown Terrorcon.
O.O Me perv...
Notes:
First two paragraphs belongs to Ikonika. She wrote them as a request I made
^_^v
Note to me:
I�M WRITING IT IN SPANISH!! HOW AM I SUPPOSED TO CALL THOSE BEAUTIFUL
APPENDICES UNDER THOSE CODPIECES???
Disclaimer:
Transformers are not mine (sadly). I don�t wanna make money out of this, I just
want my perverted side out. And erm, I like to make Scorpinok suffer =P He cute
Terrorcon
By:
Seeker Nami
Antes que se diera cuenta un grupo de tent�culos
emergieron del suelo y se enredaron alrededor de sus garras y sus piernas.
Rugiendo intent� liberar sus tenazas, de caminar, de huir a�n a sabiendas de
que no ten�a la fuerza para liberarse de las ataduras de Unicron. Una vez que
los tent�culos se sostuvieron bien se retrajeron hacia el suelo, arrojando a
Scorpinok sobre sus rodillas y manos.�Me-Megatron... �Qu� significa
esto?�Interrog� al Decepticon que se le acercaba mientras el Terrorcon luchaba
por liberarse.
Megatron sonri� cruelmente,�Oh, creo que lo sabes
perfectamente. �Te mostrar� qui�n es tu verdadero amo, traidor
insolente!�Mientras el l�der Decepticon hablaba, un tent�culo m�s peque�o se
enred� en la cintura de Scorpinok, apresando su codpiece hasta separarla del
resto de la armadura, dej�ndola caer con un estruendo al suelo. Los ojos del
Terrorcon, protegidos tras su visor, se abrieron como platos con p�nico al
sentir el aire fr�o sobre su piel, al pensar en su intimidad ahora expuesta y
vulnerable.
�Megatron. �Su�ltame!�Rugi�
Scorpinok indignado.��No s� qu� clase de broma cruel sea esta, pero ser� mejor
que te detengas!�
��Y qui�n dijo que estoy
bromeando?�Megatron levant� el rostro de Scorpinok con una mano, sonriendo con
placer anticipado ante la vulnerabilidad de su prisionero.�Pobre animal
pat�tico. �Lamentar�s haberme desafiado!�Como para hacer �nfasis en su amenaza
el tent�culo que se hab�a enroscado en su cintura comenz� a acariciar la sensible
zona en la entrepierna del escorpi�n, en momentos ejerciendo presi�n sobre el
delicado �rgano aprisionado all�. Scorpinok cerr� sus ojos; un gemido intent�
escapar de su garganta y apret� sus dientes con fuerza esforz�ndose por
contenerse, algunas l�grimas se comenzaban a formar en sus ojos. Megatron se
agach� hinc�ndose sobre su rodilla izquierda, hasta que estuvo al nivel del
rostro de su reh�n.�No eres diferente a los dem�s Terrorcon en lo absoluto.
Eres pat�tico y d�bil.�El l�der Decepticon inconscientemente pas� su lengua por
sus labios antes de acercarse a Scorpinok, bes�ndolo con crudeza en la boca.
Scorpinok intent� liberarse pero Megatron sosten�a con
firmeza su rostro. Megatron profundiz� el beso, dejando su lengua explorar la
tibieza de la boca del Terrorcon. Asustado y respondiendo a un instinto
primitivo, Scorpinok cerr� su mand�bula sobre la lengua del intruso; sus
afilados dientes abrieron el m�sculo con facilidad. El l�der Decepticon oprimi�
con fuerza los dedos de sus manos al rededor del cuello del escorpi�n mas no se
separ�. Sonriendo vilmente hizo que un nuevo tent�culo se levantara del suelo,
li�ndose inmediatamente alrededor del hermoso falo del Terrorcon, aplicando
sutilmente una mayor presi�n a cada pulsaci�n que generaba. El instinto
nuevamente se apoder� de las acciones inconscientes del escorpi�n en un intento
desesperado por liberarse, su larga cola se mov�a con violencia buscando a cada
instante poder clavar su aguij�n en el cuerpo de su captor, e incluso tratando
de quitar los molestos tent�culos con el mismo. Cansado de ver los lamentables
intentos de Scorpinok por defenderse, el l�der Decepticon hizo que los
tent�culos se reacomodaran apresando tambi�n la larga cola, que fue forzada
hasta quedar firmemente sujeta a la espalda de su due�o.
�Ahora la verdadera diversi�n puede comenzar.�Murmur�
Megatron muy cerca del audio de Scorpinok, arrastrando las palabras y haciendo
que el otro se estremeciera a pesar de s� mismo. El guerrero Decepticon pas�
sus labios y su lengua por el cuello de su v�ctima, mordi�ndolo y succionando
en los sensibles cables que hallaba a su paso, mientras sus manos acariciaban
el pecho del Terrorcon con suaves movimientos circulares; siguiendo el mismo
sutil ritmo dos tent�culos estimulaban los genitales de Scorpinok, quien no
pod�a evitar temblar de pies a cabeza.
Esto no est� pasando, no puede estar pasando... Repet�a
en silencio para s� mas las sensaciones estaban presentes, haci�ndolo ya perder
la cabeza, ya desear estar muerto. Alfa Q ay�dame, esto es una humillaci�n. Un
gemido escap� de su garganta cuando uno de los ap�ndices controlados por
Megatron se enrosc� en su miembro; para su horror Scorpinok descubri� entonces
que en efecto ostentaba ya una ardiente erecci�n. Las l�grimas que hab�a
intentado contener ahora corr�an libres por su rostro, Megatron se hab�a ya
percatado del asunto, dirigi�ndole a su juguete una mirada s�dica. El guerrero
alado pas� sus labios por el brillante rastro que las l�grimas dejaban tras de
s�, saboreando el l�quido salado, lentamente el Decepticon acerc� su boca a la
de Scorpinok, bes�ndolo profundamente de nuevo. Tras una breve pausa el
guerrero se detuvo, poni�ndose de pie, el otro lo mir� en silencio con
curiosidad y temor ante lo que pod�a estar por venir, su labio inferior
temblando d�bilmente.
��Q-qu�... qu� piensas h-hacer...?�Interrog� el Terrorcon,
una parte de �l ansiosa por saber lo que el temible demonio Decepticon ten�a en
mente aunque su nublada raz�n se manten�a deseosa de seguir en la oscuridad.
�J�zgalo por ti mismo, traidor.�Las manos de Megatron
bajaron lentamente por su vientre hasta llegar a su entrepierna, donde se
detuvo por unos momentos, sus manos movi�ndose en peque�os c�rculos; lentamente
abri� los seguros que manten�an la armadura unida y separ� la amplia codpiece
que le proteg�a. El Decepticon exhal� con fuerza cuando su erecci�n estuvo
liberada, dedos experimentados acariciaban la extensi�n total del sensitivo
�rgano. Megatron dirigi� una sonrisa amplia al robot cerca de �l, complacido sin
mesura ante lo que estaba por venir. Alarg� su mano libre, tomando a Scorpinok
por la nuca, haci�ndolo voltear hacia arriba. La mirada en los �pticos del
escorpi�n satisfac�a en parte su s�dico deseo. �La hermosa visi�n de alguien
humillado, postrado a su total merced era quiz� el mejor afrodis�aco en el
universo!�Veremos para qu� m�s saber usar esa bocota.�Murmur� el Decepticon,
acerc�ndose a�n m�s a su prisionero. Scorpinok intent� desviar su rostro pero
la mano de Megatron le ten�a bien sujeto, cerr� sus ojos y labios con fuerza en
una �ltima maniobra desesperada.
El l�der Decepticon solt� una carcajada al tiempo que
sosten�a su impresionante miembro con firmeza, dirigi�ndolo lentamente a su
objetivo; la punta, humedecida por el l�quido pre-eyaculatorio se pos� en los
labios del escorpi�n y empujando con fuerza Megatron abri� la boca del robot,
insertando el �rgano por completo hasta casi ahogar a su cautivo. Las manos del
Decepticon descansaron en la nuca de Scorpinok, sosteni�ndole con firmeza
mientras Megatron comenzaba a empujar sus caderas con fuerza. Adelante y atr�s
siguiendo un ritmo acompasado pero veloz.
Abajo, los tent�culos manten�an su propio comp�s,
estimulando al Terrorcon; uno de los delgados ap�ndices produc�a una leve
vibraci�n sobre la cabeza del falo hiper-sensible, haciendo que un escalofr�o
recorriera la espalda de Scorpinok mientras un fino l�quido goteaba del miembro
henchido.
Scorpinok gimi�, el ruido silenciado por el �rgano
atrapado en su boca. Megatron lami� sus labios, apresurando a�n m�s el
movimiento de sus caderas, introduci�ndose lo m�s que pod�a en la garganta del
miserable Terrorcon.
La mente de Scorpinok se hab�a nublado, se sent�a como si
hubiese ca�do entre una espesa neblina que no lo dejara pensar. Sent�a fuego en
el vientre como si algo lo quemara por dentro. Sorpresivamente su instinto
salvaje m�s oscuro estaba despertando; comenzaba a desesperar, necesitaba
sentir, experimentar. Dejando de lado su orgullo comenz� a estimular a su
captor, tom�ndole por sorpresa. Lo deseaba, sab�a que lo deseaba, la tortura
volviose un juego ardiente del que necesitaba aprender sus reglas. Su
lengua friccionaba el inferior del pene de Megatron, succionando con fuerza la
punta del mismo y, ocasionalmente, mordi�ndolo con delicadeza.
�Quieres sentirlo dentro de ti. Lo s� con tan s�lo ver tus
acciones, tu cuerpo mismo te ha traicionado. Tu orgullo, Terrorcon no
era como esperabas.�Agach�ndose nuevamente, el Decepticon mordi� el sensible
metal de su audio antes de murmurar: ��Quieres sentirlo hasta el fondo, en su
totalidad dentro de ti?�Scorpinok se mantuvo llorando en silencio, ignorando a
Megatron.�No puedes negar lo que tu cuerpo desea. Quiz� tu mente no, pero tu
cuerpo s� y es m�s fuerte que tu voluntad.�
�C�llate...�Musit� Scorpinok casi sin aliento.��Jam�s
admitir�a cosa semejante! �Primero muerto que permitirte humillarme a�n m�s!�
�Eso dices. Pero cr�eme, una vez que te haya pose�do no
har�s otra cosa que gritar mi nombre y suplicar.�Megatron camin� hasta quedar
detr�s del Terrorcon que temblaba de rabia. Los tent�culos abandonaron los
genitales de Scorpinok de s�bito, haci�ndole exhalar pesadamente. Su
respiraci�n errante era todo cuanto Megatron necesitaba para saber que, a pesar
de todo, las defensas de su prisionero estaban debilit�ndose. Su mano entonces
avanz� hacia abajo desde la base de su larga cola hasta su entrepierna,
deteni�ndose a acariciar sus test�culos con la palma de su mano, masaje�ndolos
y presion�ndolos como si fuesen dos peque�as pelotas de gel. Scorpinok gimote�,
su cuerpo movi�ndose compulsivamente desobedeciendo a su control.
��Desesperado?�Ri� Megatron.�Esperemos que no. Quiero
verte sucumbir lentamente a mi tormento.�Mientras con su mano izquierda segu�a
masturbando a Scorpinok, su mano derecha comenz� a explorar un poco m�s arriba
buscando el peque�o orificio oculto por una delgada placa de metal. Megatron
sab�a que iba a encontrar m�s de lo que pudiera esperar dado que este como
todos los Terrorcon, era un ser tecno-org�nico; el Decepticon mordi� su labio inferior.
S�, seguramente penetrar a un animal casi por completo org�nico ser�a una nueva
y grata experiencia. Sus dedos tropezaron con la delgada plaquita que buscaba y
con un h�bil movimiento la removi� de su lugar.
��Al�jate de all�!�Grit� Scorpinok, sus ojos abiertos como
platos.
�Obl�game...�Respondi� su captor sin inmutarse, despu�s de
una corta pausa Megatron se acerc� y lami� la tibia entrada al cuerpo del
escorpi�n; La punta de su lengua trazando c�rculos alrededor. Separ�ndose de
s�bito, Megatron introdujo su dedo �ndice por la abertura lo m�s profundo que
pudo, recibiendo un grito de dolor por parte del otro como respuesta.�Vaya,
vaya �Qu� tenemos aqu�? Est� muy estrecho... �Primus! Jam�s pens� que ser�as
virgen, mi querido Scorpinok.�
��Qu�tame tus sucias manos de encima!�Bram� Scorpinok
cuando un poco de su raz�n se hab�a aclarado. Su larga cola luchaba por
liberarse, Megatron habr�a sido un blanco f�cil para �l de estar libre su
aguij�n. Megatron solt� una carcajada e insert� un segundo dedo en la ardiente
abertura silenciando las infructuosas amenazas del escorpi�n. Sonriendo
maliciosamente Megatron lami� una vez m�s al escorpi�n y retir� su mano por
completo, en esta ocasi�n su prisionero no hizo nada y permaneci� en silencio,
respirando con dificultad.
El Decepticon tom� su miembro con una mano, frot�ndolo con
su pu�o cerrado sobre �l hasta que una brillante gotita blanca man� del mismo;
con su dedo pulgar unt� la peque�a cabeza con el pegajoso l�quido hasta que
estuvo bien humedecida. Posicion�ndose justo detr�s de su prisionero su mano
dirigi� el falo hasta quedar en posici�n. Megatron mordi� su labio inferior,
succionando levemente al sentir a Scorpinok de semejante manera.
Por su parte el Terrorcon temblaba, no pod�a hacer nada.
Parte de �l disfrutaba del trato que se le estaba dando y se odiaba por lo
mismo. Sentir el pene de su captor tan peligrosamente cerca estaba teniendo el
efecto m�s extra�o en �l y una vez m�s todo vestigio de raz�n en su CPU cay� en
el olvido. Jadeaba de placer, mas segu�a resisti�ndose a expresar en voz alta
lo que sent�a, lo que estaba pensando. No, no pod�a darle a su enemigo ese
gusto, no despu�s de que su cuerpo mismo se hab�a entregado sin gran esfuerzo.
Un dolor punzante le recorri� la espalda cuando Megatron
lo penetr� bruscamente, y un grito agonizante dej� sus labios. El Decepticon no
ten�a piedad alguna, sumido en su propio placer ego�sta trataba al Terrorcon
como poco menos que un objeto inanimado. Megatron entraba y sal�a de �l con
violencia y el estrecho orificio hab�a comenzado a sangrar o eso parec�a
al brotar el l�quido trasl�cido que daba vida a sus sistemas internos. Megatron
masturbaba a Scorpinok con igual arrebato, lastim�ndolo y excit�ndolo a la vez.
El Terrorcon ya no jadeaba en silencio, sus gemidos aumentando de volumen
conforme los segundos pasaban.
�Te gusta. Lo sab�a. No hay criatura, org�nica o mec�nica
en el Universo que pueda soportarlo.�Murmur� el l�der Decepticon con palabras
entrecortada sintiendo su mano h�meda con la propia semilla del traidor.
�Me.... Mega... tron...�Mascull� Scorpinok casi sin
aliento. Los espasmos del orgasmo empezaban a hacerse presentes, sus jadeos
aumentaban al mismo comp�s. Entonces toda resistencia final se desvaneci�,
dej�ndolo como una simple criatura entregada a sus deseos oscuros.�Megatron,
e...estoy...�No pudo siquiera terminar de formular la idea cuando el orgasmo
lleg� de golpe, haci�ndolo gritar en total abandono.
Escuchar a su enemigo y sentir el tibio l�quido brillante
mojando su mano casi hab�an provocado en Megatron la misma reacci�n, pero con
incre�ble habilidad se contuvo, saliendo del cuerpo de su Terrorcon.
Ten�a una idea diferente para su propio orgasmo. Sinti� como el otro robot
temblaba extenuado y los tent�culos que le hab�an sostenido todo el tiempo le
soltaron poco a poco y se ocultaron una vez m�s dentro de las paredes de
Unicron. El Terrorcon apenas y pudo sostenerse por s� mismo cuando estuvo
liberado. Sus garras y rodillas se sent�an adormecidas, sin fuerzas. Su cola,
ahora libre, colgaba tras de �l rendida, como de trapo.
�Me has... humillado� y sin embargo� no tengo siquiera la
dignidad de mirarte a la cara.�Dijo Scorpinok con voz casi inaudible, soltando
una risilla amarga cuando vio las piernas de Megatron acerc�ndose a �l.
�M�rame a la cara.�Orden� Megatron en tono de burla y el
escorpi�n lo obedeci� de inmediato, cansado ya de resistirse. La mirada de
Megatron era cruel y sus facciones mostraban su amplia satisfacci�n. Entonces
not� el escorpi�n que Megatron a�n sosten�a su erecci�n en una mano, Scorpinok
adivin� las intenciones del Decepticon y resignado se acerc�. Cerrando sus ojos
abri� la boca, su lengua acariciaba la parte inferior del miembro henchido,
Megatron sinti� un escalofr�o recorriendo su cuerpo. Su miembro sensible dando
indicios de estar llegando a su l�mite. Arrojando su cabeza hacia atr�s, el
Decepticon abandon� toda raz�n cuando el orgasmo tan esperado lleg�,
inund�ndolo de un gran �xtasis.
Megatron levant� a Scorpinok, forz�ndole a verlo a los
ojos; el rostro del escorpi�n estaba cubierto del brillante semen del guerrero
Decepticon. El Terrorcon dej� caer sus hombros, desviando la mirada.
��Qui�n es tu amo? �Qui�n es tu due�o?�Pregunt�
Megatron en voz baja.�Quiero o�rlo.�
De haber tenido manos, Scorpinok las habr�a cerrado con
fuerza, temblaba de pies a cabeza en parte por rabia, en parte por la energ�a
drenada por su orgasmo.�Mi amo... e-eres... eres t�.�Concluy� al fin con un
nudo en la garganta, llorando a�n.
�As� me gusta. Eres un animalito muy inteligente,
Scorpinok.�
Scorpinok regres� rengueando a la base de Alfa Q en la
cabeza de Unicron. Estaba adolorido, lastimado y humillado. La pesada puerta
que dirig�a a la c�mara del ser de cuatro cabezas se abri� de s�bito.
��Mi querido Scorpinok, has vuelto!�Gritaron las tres
cabezas que normalmente ten�an el control del cuerpo biomec�nico, mas su
alegr�a se vio interrumpida al ver a su querida mascota y comandante Terrorcon
reducido a poco menos que basura. El Quintesson le mir� aterrado.��Qu� te han
hecho, mi peque�o Terrorcon?�Pregunt� la m�scara que parec�a el rostro
estilizado de una geisha en una m�scara kabuki, avanzando con dificultad hacia
�l. La armadura de Scorpinok estaba reducida a trizas al igual que su dignidad;
su codpiece destruida a prop�sito por Megatron para mayor degradaci�n del
Terrorcon y su otrora orgulloso rostro manchado con el semen de su enemigo.
Alfa Q pos� una de sus largas garras en la mejilla de su escorpi�n,
acarici�ndolo con ternura.
�Perd�name Alfa Q... te he fallado.�Murmur� Scorpinok,
dirigi�ndole a su �nico y verdadero amo una peque�a sonrisa melanc�lica,
suplicante. Su cola ondeando d�bilmente un poco oculta entre sus piernas,
entonces sus �pticos se apagaron y se desplom� a los pies de Alfa Q, las tres
cabezas m�s emotivas lloriqueando locos de ira y dolor hasta que la cuarta
cabeza apareci�, la voz de la raz�n y con cuidado arrastr� a Scorpinok hasta
las escaleras que conduc�an a su sitio de guardia. All� un cable sali� del
suelo y Alfa Q lo conect� al pecho del robot. Este abri� los ojos e intent�
hablar, siendo silenciado por su maestro.
�No tienes de qu� disculparte. Ahora debes descansar.�
Scorpinok cay� en modo de recarga, una �ltima l�grima rod�
por su rostro para caer en el suelo.
FIN
Now� what bring that on? It was a pain in the
exhaust pipe but I made it!! But I feel sorry for my scorpion baby� -.-��
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